Rinoplastia

La rinoplastia tiene como objetivo principal, modificar la forma externa de la nariz, proyectando una mejor apariencia estética. Si la cirugía requiere también una corrección funcional, este procedimiento se denomina rinoseptoplastia.

Al efectuar el procedimiento se trabaja sobre el tamaño, la forma y las proporciones de la nariz; así también, puede realizarse para reparar deformidades causadas por una lesión, corregir una anomalía congénita o mejorar ciertas dificultades respiratorias.

En la consulta médica, el cirujano considerará sus características, mediciones y ángulos faciales, todos los detalles anatómicos de su rostro y, conjuntamente, se determinarán las expectativas y las subsecuentes recomendaciones. Durante esta evaluación se podrán revisar casos reales pre y post quirúrgicos. Con toda esta información, el especialista determinará si el paciente es candidato idóneo para el procedimiento.

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¿Qué ocurre durante el procedimiento?

La rinoplastia es un procedimiento que se realiza bajo anestesia general. Conjuntamente con el especialista, un equipo de apoyo médico conformado por anestesiólogos, asistentes y enfermeras controlarán y monitorearán los indicadores del estado del paciente. La técnica mayormente utilizada es la técnica abierta; esta, permite una mayor visualización y fácil acceso a todos los componentes nasales, por lo que es la más indicada para correcciones en narices previamente intervenidas.

Durante la intervención, el cirujano abordará el tabique septal para obtener material cartilaginoso necesario y así poder reestructurar el soporte, el dorso y las alas nasales de acuerdo al caso.

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¿Qué ocurre luego del procedimiento?

La rinoplastia es un procedimiento que se cataloga como ambulatorio; es decir, el paciente no requiere hospitalización, salvo casos puntuales donde el especialista le dará a conocer si es necesario un monitoreo de la evolución por un tiempo más prolongado. Todos los cuidados inmediatos -luego del procedimiento- respecto a la alimentación, posición de descanso, precauciones y actividades que debe evitar, serán indicados previo al alta hospitalaria. El paciente dispondrá de una férula (tablilla flexible – rígida) en su nariz, esto por aproximadamente 7 días, para proporcionar el apoyo necesario así como la protección debida.

Rinoplastia
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